El gusto no es algo que puedas juzgar fácilmente, especialmente cuando se trata de arte. Lo que algunas personas pueden considerar repulsivo o escalofriante, algunas otras personas pueden encontrar atractivas e incluso brillantes. Como dije, es una cuestión de gusto. Así que si echas un vistazo a estos muebles hechos de viejas minas submarinas que, por supuesto, se hicieron inofensivos primero y después de que se fabricaron para que parezcan muebles, puedes tener dos sentimientos opuestos: o te encanta o lo odias.
Y puedes tener estos dos sentimientos al mismo tiempo y tampoco puedes ignorarlo. Sé que este mobiliario parece ser de una película de terror, pero pensemos más en la idea de crear muebles de antiguas y oxidadas minas navales recuperadas de una fortaleza ex soviética en la isla de Naissaar. Mati Karmin es un escultor estonio que hizo estas piezas de arte. La colección incluye sillones, acuarios, escritorios, baños, camas, armarios, columpios, chimeneas, bañeras y muchos más.
