Hilberink Bosch Architects diseñó un hogar moderno, situado al borde de un bosque en Heesch, Países Bajos. Aquí está la información de la descripción del proyecto que nos enviaron: La casa consta de dos volúmenes diferentes: una base en forma de L en la que se equilibra un volumen oblongo. Juntos forman una escultura que se asemeja a un árbol caído sobre una pila de tierra. Las funciones públicas de la casa están situadas en la base en forma de L. Las paredes exteriores de la forma de L que miran al camino público parecen inaccesibles y secretas. La pared está hecha con ladrillos largos, oscuros y robustos que resaltan las líneas horizontales. El interior de la casa es abierto y ligero. La sala de estar está conectada con la terraza, el jardín y el bosque y una gran cantidad de luz entra a la casa. La fachada del jardín de la casa está formada por una estructura de hormigón, la imaginación de la vida moderna dentro de la muralla.
Todos los bordes de los diferentes volúmenes están hechos sin aleros, el material se disuelve en el aire. Esto refuerza la apariencia abstracta de la escultura. Así como un vagabundo, atrapado en una tormenta, buscará refugio bajo un árbol caído, los habitantes encontrarán protección en esta casa. Los diferentes aspectos del estudio se convierten lentamente en un edificio real. El edificio se convierte en parte de la poesía, parte de la memoria, se vuelve significativo. "[Fotografías: René de Wit, Paul Kozlowski]
