Los arquitectos de Grosfeld Van der Velde querían traer la hermosa naturaleza dentro de esta casa cerca de la parte sur de los Países Bajos, cerca de una ciudad llamada Breda. Llamado Casa KvD, este moderno edificio descansa entre los árboles del bosque de Teteringen. Su forma cuadrada le permite disfrutar del maravilloso entorno a través de los grandes ventanales a medida que avanza por los corredores. Un patio interior se forma entre la planta baja y la parte elevada del cuadrado. La cocina está ubicada en el suelo, la sala de estar se encuentra en la parte más alta del edificio, mientras que las habitaciones se elevan por los pilones para una mejor vista del bosque.
La entrada a la casa está hecha desde el patio interior. Hermosos ventanales crean un aspecto artístico: las ventanas enmarcadas ofrecen un recorte del panorama forestal. La fachada está hecha de revestimiento de madera teñida en negro colocada verticalmente, lo que le da una sensación majestuosa observada al mirar el enorme tamaño de la casa. Los techos altos en la sala de estar amplifican la sensación majestuosa y ofrecen increíbles vistas enmarcadas del bosque. Un hermoso detalle, el pequeño patio en frente de la cocina amplía la sala de estar durante los días soleados. Cuando las grandes puertas corredizas están abiertas, la luz del sol y el aire fresco del bosque pueden precipitarse.
