Marcio Kogan construyó una casa increíble con algunas características que diferencian este edificio de todo lo que hemos visto antes. Ubicada cerca del parque más grande de Sao Pauolo, Brasil, la Casa Corten está construida sobre un sitio angosto que hizo posible la arquitectura: una casa rectangular con un techo muy alto (5,2 metros) y cuatro puertas plegables que se abren a una cubierta exterior con una chimenea increíble. La casa de Corten obtuvo su nombre del acero de intemperie que cubre el exterior. Los materiales utilizados para mejorar el aspecto y las funciones de esta casa son una mezcla de piedra, madera, acero COR-TEN, mortero blanco y vidrio. Las puertas de vidrio de piso a techo en la parte posterior de la casa ofrecen suficiente transparencia para que el sol llegue tanto a la sala de estar como a la habitación. Afuera, la entrada coincide con el color oxidado del Corten, pero en realidad está hecho de madera y sorprende a los huéspedes que entran por la puerta de garaje de madera a rayas que da a la calle.
El concepto detrás de esta casa es interesante: un cubo de madera contiene la cocina y los servicios públicos, mientras que en la parte superior los habitantes pueden relajarse en el cine en casa. Las escaleras entre el cubo y la entrada principal conducen al siguiente piso, donde se encuentran los tres dormitorios. Otro conjunto de escaleras conduce a la azotea, una cubierta increíble protegida por barandillas de vidrio donde uno puede disfrutar de la piscina climatizada mientras contempla un panorama impresionante de Sao Paulo. El diseño interior fue concebido por Diana Radomysler y presenta paredes de piedra como fondo perfecto para los muebles contemporáneos de color neutro y piezas de arte intrigantes. La luz y el espacio crean la combinación moderna perfecta que hizo de esta casa una obra maestra arquitectónica.
