¿Cuál es su relación con la nueva ola de comida vegana cruda? En la publicación de hoy nos gustaría presentar un elegante puesto de comida construido por L. McComber Architecture para Crudessence, una cadena de restaurantes vegetarianos crudos en Canadá. Cubriendo un área de tan solo 200 pies cuadrados, el puesto de concesión incluye un congelador, un refrigerador de pie, una gran mesa de ensamblaje refrigerada, una pantalla refrigerada, una caja registradora y un fregadero. El núcleo está envuelto en un caparazón independiente cuya inusual apariencia orgánica intriga a los clientes y espectadores. Construido a partir de madera de cerezo maciza cortada digitalmente, se asemeja a la cáscara de una fruta o la cáscara de una nuez. Dependiendo del punto de vista del observador, el caparazón se cierra para ocultar parte del núcleo, o se abre para invitar a los transeúntes y compradores a tomar un respiro y ceder a una exquisita revitalización.
Crudo, ecológico y vegano, el puesto de venta de Crudessence ofrece una alimentación beneficiosa que no requiere cocinar en absoluto. Por lo tanto, los aparatos que se utilizan están destinados a preservar la frescura de los alimentos, así como a cortarlos, molerlos, mezclarlos, montarlos y servirlos. Todos los equipos, placas para salpicaduras, encimeras y mobiliario integrado están fabricados con acero inoxidable para una mayor durabilidad, así como para generar una sensación de seguridad y frescura. Son el corazón y el alma de lo que se presenta como una máquina para extraer la esencia vital de la comida de calidad. [Fotografía: L. M. Chabot]
