El mundo está dirigido por algunos principios esenciales. Uno de ellos, y probablemente el más conocido y amado, es lo que los latinos llamaron "coincidentia oppositorum", o, en inglés, la atracción del principio de los opuestos. Este es también el fondo del concepto de filosofía asiática Yin y Yang. Visual, esta atracción entre el día y la noche, la luz y la oscuridad, lo bueno y lo malo, el Sol y la Luna se expresaron mediante la yuxtaposición de dos colores simples: blanco y negro. Desde la Antigüedad, esta combinación era muy querida, no solo por el efecto cromático contrastivo, sino también por su significado. Se sorprenderá si se toma su tiempo y analiza los objetos simples que le rodean. Verás que muchas cosas a tu alrededor son en blanco y negro. Un buen ejemplo es el tablero de ajedrez.
