Este moderno apartamento de 130 metros cuadrados está situado en Mozhaiskoe Shosse, Moscú, y fue diseñado por la oficina de arquitectura del interiorista ruso Allexandra Fedorova. Elegancia y sobriedad son los atributos principales que caracterizan a esta cuna rusa contemporánea. El pasillo de entrada (espacio de almacenamiento completamente oculto) conduce a la sala de estar, comedor y cocina de gran tamaño. Con paredes enlucidas blancas y lámparas colgantes, esta habitación tiene una sensación inmaculada. Nada parece perturbar esta armonía construida con tal atención a los detalles. La pintura roja en la pared es el único elemento que desafía los tonos neutros. El diseño del dormitorio está en sintonía con el del área social, pero gana un poco más de calidez con la ayuda de los contrastes de las paredes y el sillón con diseño. Una cama voladiza actúa como el punto focal del interior. Ligeramente más alegre, la habitación de los niños alberga color y emana una sensación más amigable. ¿Cómo aprecias el diseño general de este lugar?
